Sobre las 11:30 llegamos al albergue de Espinosa. Nos estaban esperando David, Patricia y Ángela, los monitores que nos acompañarán estos días. Nos presentamos y subimos a instalarnos en las habitaciones. Unas sábanas bajeras por aquí, unas almohadas por allá, sacos, maletas… la verdad que ha sido muy divertido.
Después comimos y jugamos un poquito, porque por la tarde teníamos que coger un tren. Nos acercamos a un monte donde había tumbas antropomórficas del S. X, nos contaron cómo fue el éxodo rural de Espinosa a Bilbao, y cómo vivían no hace tanto tiempo por esta zona.
Hemos podido usar las linternas y probar la gastronomía de la cocina del albergue. Nos ha encantado el día y en breve nos iremos a dormir para seguir mañana.
Por aquí estamos fenomenal. Nos dura la ilusión y las ganas de pasarlo bien. ¡Un beso muy fuerte!