¡¡Hola familias!!

Ya hemos «sobrevivido» a nuestro primer mes en el colegio.

El cole esta dejando de ser un lugar desconocido con gente desconocida y está empezando a ser un espacio amable con personas que nos cuidan, nos dan cariño, nos hacen reír y, a veces, también nos riñen (como en casa).

Venir al cole ya no es tan angustioso (aunque a veces tenemos que disimular para que parezca que sí). Las profes no llevan a muchos sitios y nos cuenta muchas cosas.

En solo un mes ya hemos visitado casi todo el colegio.

Hemos ido a desayunar al cole de infantil y hemos bajado con ellos a jugar a su patio con las cortezas y con unas ruedas gigantescas.

También hemos subido a clase de los de 6º de Primaria a darles una sorpresa, porque siempre vienen a vernos, y al final nos sorprendieron ellos a nosotros con un baile.

Como no podía ser de otra manera, también hemos subido a conocer la cocina que tan felices nos hace con sus comidas.

Y, por supuesto, hemos inaugurado el jardín nuevo que tenemos al lado de nuestro patio. Fue un día espectacular, las cuestas nos encantaron y disfrutamos muchísimo haciendo la «croqueta».

 

 

Pero….nuestra aventura en el cole no acaba aquí.

El viernes pasado tuvimos una visita en el cole muy muy especial.

Vinieron a pasar el día con nosotros dos pollitos (aunque ya un poco crecidos).

Los sacamos de su caja para que pasearan por la clase, aunque como era su primer día les dio un poco de miedo y no se atrevieron a bajar de la mesa.

Se portaron muy bien y estuvimos viéndoles comer el maíz y el trigo. Aprovechamos para cantarles todas la canciones de pollitos que nos sabíamos y parecía que se ponían muy contentos.

Esperamos que vuelvan otro día a visitarnos al cole porque fue muy divertido tenerles con nosotros y les cuidamos muy bien.

 

Hasta aquí nuestra primera toma de contacto con el cole (y no se nos está dando nada mal).

Nos vemos la próxima semana.

¡Feliz fin de semana familias!